En los 60 durante la segunda mitad del siglo XX, las nuevas formas onduladas, la combinación de colores vivos y los materiales plásticos cobraron un protagonismo muy importante, que permitió una mayor libertad de expresión y muchas posibilidades de elección.

El diseño del mobiliario fue experimentado hasta tal punto, que pocos muebles superan esta explosión creativa, en nuestros días, tanto por las formas como por los materiales empleados, la silla Ball Chair de Eero Arnio, es un claro ejemplo de que pocos diseños actuales lo superan, el concepto de “menos es más” fue un puente hacia el diseño radical de los años 70, influenciado por estilos como el surrealismo, el futurismo y el art deco.

Los espacios y los muebles, creados por unos diseñadores, como Verner Panton, se proyectaron justo para levantar emociones y visiones espaciales.

La llamada Era Espacial ó Space Age fue una inagotable fuente de inspiración tanto para los diseñadores como para los consumidores y concurrió a alimentar el desarrollo del diseño futurista y modular, se pasó del mueble de los 50, que era y es un mueble magnifico, al contraste con el blanco, y el estilo Op-Art.

En los 60 se creó el concepto de que cada objeto tiene un tiempo para que el comprador lo tire y compre otro, a cambio del bajo coste de un producto. Esto causó el consumísmo que reina en el mercado hasta hoy en día.

En los años 60, algunos artistas en Estados Unidos, como Andy Warhol, empezaron a inspirarse en “el arte menor” de la vida cotidiana como la publicidad, el envasado, el packaging, los comics y la televisión, el estilo Pop empezó a manifestarse en objetos de consumo cotidiano, y los diseñadores buscaron un planteamiento más juvenil y divertido, menos serio que el buen diseño de los años 50.

Srta. Jara (la explosión del diseño en los 60’s)